Durante la inspección ordenada por la titular de la Fiscalía PCyF N° 11, María Valeria Massaglia, se encontró gran cantidad de medicamentos en infracción, vencidos y otros sin rotular. Todo fue secuestrado y tenía numerosas irregularidades en los dos laboratorios de la farmacia, por lo cual fue clausurada.
El caso se inició a partir de una investigación más amplia sobre tratamientos médicos ilícitos y ejercicio ilegal de la medicina. A partir del análisis de los elementos secuestrados en un operativo anterior, la investigación puso el foco sobre una farmacia ubicada en la calle Jujuy al 200, en la zona de Once.
La fiscal Massaglia ordenó la realización del operativo en el establecimiento investigado, que fue realizada por personal del Cuerpo de Investigaciones Judiciales del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, la División Delitos contra la Salud Pública de la Policía de la Ciudad, el Ministerio de Salud de la Nación, la ANMAT y la Dirección General de Fiscalización y Control del GCBA.

En el procedimiento se logró verificar la existencia de dos laboratorios al interior de la farmacia, los cuales se encontraban en condiciones deficientes y con diversas irregularidades, como contar con heladeras para medicamentos con temperaturas fuera de rango, funcionar sin la campana de extracción correspondiente. Además, el sector de depósito de los medicamentos del mismo era manipulado por personal no idóneo.
A su vez, se encontraron materias primas de suplementos dietarios en idioma inglés -lo cual se encuentra expresamente prohibido por la legislación-, envases plásticos con distintas sustancias líquidas aromatizantes vencidas y 306 ampollas sin rotulo y sin las respectivas recetas respaldatorias, todo lo cual fue secuestrado.
Ante tal situación, la fiscal imputó a la responsable del lugar por los delitos de suministro ilegal de medicamentos, y venta, suministro o distribución de sustancias peligrosas para la salud disimulando su carácter nocivo, tipificados en los artículos 201 y 204 del Código Penal.