Personal de la División Capturas y Prófugos de la Policía de la Ciudad intervino en la búsqueda de una mujer que se mantenía prófuga de la Justicia tras ser denunciada por una millonaria estafa.
La orden de detención provenía originalmente del Juzgado Penal de la Jurisdicción de Puerto Madryn, a cargo de la doctora Stella Eizmendi y de la Unidad Fiscal del doctor Alex Williams, y contó con la intervención del Juzgado Nacional en lo Penal de Rogatoria del doctor Ghirlanda, Secretaría Única del doctor Bustos.
Al contar con la pista de que la fugitiva tenía un domicilio en el barrio de Balvanera, tomó participación en el caso la Policía de la Ciudad.
En primera instancia, las tareas las hizo la Sección Ciberdelito Contra el Sistema Financiero, dependiente de la División Conductas Informáticas Ilícitas, en conjunto con la División Investigaciones de Puerto Madryn, y se llevaron a cabo una serie de allanamientos que tuvieron como resultado el secuestro de gran cantidad de documentación, pero sin encontrar a la implicada.
Así las cosas, se le asignó el caso al Departamento de Investigaciones Capturas 6, que tras realizar una guardia discreta en inmediaciones de una vivienda ubicada en la avenida Entre Ríos al 1600, logró detener a la parte buscada.
La imputada fue puesta a disposición de la Justicia, acusada de haber estafado a un hombre en 2017 por tres millones de pesos mediante un Plan Nacional de Autoahorro.
Maltrato animal
Personal de la División Contravenciones y Faltas en Eventos Masivos de la Policía de la Ciudad llevó a cabo un allanamiento en un domicilio de la calle Bartolomé Mitre al 3100, luego de recibirse una denuncia por maltrato animal.
El Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas Número 28, a cargo de la doctora Correa, junto con la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental del doctor Santurián, ordenó a la fuerza porteña iniciar una investigación para dar con el lugar donde incumplían con la Ley de Protección al Animal, malos tratos o actos de crueldad.
Los oficiales de la Policía de la Ciudad ingresaron al domicilio con la cooperación del personal del Cuerpo de Investigaciones Judiciales, del B.A.P, de la Guardia de Auxilio, veterinarios de APRA, la División Perros y la ONG “Soplo de Vida”.
Como resultado del allanamiento, se rescataron nueve perros Husky Siberiano (un cachorro y ocho adultos). La mayoría de ellos se encontraban con signos de abandono, el score bajo acorde a su raza y tamaño, sin comida ni agua y que caminaban sobre sus propias heces. Además, se encontraban en un lugar cargado de artefactos que hacían imposible su circulación.