En los fundamentos del proyecto presentado por la diputada de la Ciudad Claudia Neira se destaca que el día de ayer, 11 de julio del año 2023, fueron condenados los agentes Isassi, López, Nieva, Baidón, Ozán, Du Santos, Romero, Inca y Cuevas por el Tribunal Oral en lo Criminal N° 25. Tres de ellos, recibieron la pena de cadena perpetua, por el agravante -entre otros- de “odio racial”.
En el marco de la investigación de los hechos, se pusieron de manifiesto una serie de irregularidades vinculadas al Jefe de la Policía de la Ciudad, Gabriel Berard y al Subjefe Oscar Cuevas. La defensa de Arévalos, expresó que hubo una reunión con los familiares de los policías imputados, en la que las autoridades de la Policía de la Ciudad habrían ejercido una presión para evitar develar los responsables del encubrimiento de los hechos.
El imputado, ahora absuelto, Ángel Arévalos, expresó también en el marco del proceso que “El Jefe de la Policía de la Ciudad, por intermedio de dos de sus abogados, están presionando al personal subalterno, a los oficiales de menor jerarquía (…) para que ellos hablen con sus familias y digan que no escucharon nada (…), que desacrediten lo que mi hermana dijo”.
Asimismo, a partir de las manifestaciones de Arévalos y Cuevas, se abrió una investigación por presunto encubrimiento del homicidio de Lucas González contra Gabriel Berard. Según Cuevas, el Jefe de la Policía habría sido informado del operativo y, presumiblemente, habría intervenido directamente en maniobras para evitar el esclarecimiento de los hechos.
“En este sentido, resulta fundamental para sostener la integridad ética y moral de la Policía de la Ciudad y permitir el correcto esclarecimiento de los hechos por los que se encuentran siendo investigados, la revocación de los cargos del Jefe y Subjefe de la fuerza”, destaca el proyecto.
Ha quedado claro a lo largo de estos casi dos año que, así como el caso del homicidio de Lucas González no fue un hecho aislado de violencia institucional sino el terrible desenlace del accionar desplegado por las brigadas en un marco institucional que los habilitaba a moverse impunemente y sin los controles correspondientes en el territorio, el encubrimiento tampoco fue un hecho aislado de un grupo de agentes que decidió ocultar la responsabilidad de los imputados, sino una maniobra articulada y organizada desde la Jefatura de la Policía con todo el despliegue de su poder.
El día 17 de noviembre del año 2021, Lucas González, un joven de 17 años, fue asesinado en el barrio de Barracas de nuestra Ciudad. Lucas fue asesinado por 3 agentes que formaban parte de la Brigada 6 de la Comuna 4, de la Policía de la Ciudad.
Ese día, un vehículo en el que se desplazaban los 3 efectivos comenzó una violenta persecución de Lucas y los amigos que lo acompañaban en el vehículo de uno de ellos. El Nissan Tiida de la Brigada 6 dio un giro en U y los jóvenes, al no visualizar identificación alguna en el vehículo ni sus conductores, interpretaron que se trataba de un intento de robo por lo que tendieron a huir. Así, en el cruce de Iriarte y Vélez Sarsfield, los policías dispararon y Lucas recibió dos impactos, de los cuales uno de ellos fue en la cabeza.