a ola de calor extremo ya empieza a ser un recuerdo mientras se empiezan a ver camperas y gorros por las calles porteñas, entre hojas secas y el cielo gris de otoño. Para muchos fue en otra vida que hubo tal frenesí con casi cuarenta grados de sensación térmica en plena madrugada y media ciudad cercada por los reclamos vecinales, entre fogatas y barricadas, ante la extensa falta de luz en medio de un momento de tanta necesidad.
No obstante, para otros la pesadilla de estar a oscuras es algo en tiempo presente. Así lo viven los vecinos y comerciantes de la avenida Entre Ríos.
Desde la Asociación Comerciantes Profesionales e Industriales de la Av. Entre Ríos informaron a Abran Paso que muchas cuadras siguen con problemas de suministro. Para muchos ciudadanos solo bajó la temperatura: el drama de estar a oscuras sigue presente.
“Estamos sin luz desde el sábado (18 de marzo)”, dijo este jueves 23 al mediodía a Abran Paso Pablo Codesido, dueño de la Librería y Papelería Codesido ubicada en Entre Ríos 711, esquina Chile.
“En realidad, te cortan, te dan suministro. Tenemos una fase sola, por lo cual no podemos tener agua”, agregó.
Esta situación se torna dramática en el cotidiano. Los comerciantes se ven imposibilitados de trabajar con normalidad. Además, los vecinos deben afrontar una gran cantidad de contratiempos para realizar sus tareas más elementales.
Y no es solo el día a día el que se ve perjudicado. En algunos casos, la falta de luz irrumpe en momentos de extremada fragilidad.
Por caso, Pablo menciona que el miércoles 22 de marzo por la noche un vecino con una enfermedad crónica se hallaba sin luz en su domicilio cuando se descompensó.
El hombre reside en los pisos superiores de un edificio que por estos momentos no tiene suministro.
Esto obligó a que varios vecinos llamaran al 911 para que la Policía de la Ciudad se hiciera presente para dar asistencia, a fin de garantizar la seguridad de hombre en el descenso de los pisos superiores.
El resultado final fue que un camión de los Bomberos de la Ciudad debió hacerse presente para encarar el operativo de “rescate” de este hombre que se hallaba en un momento delicado por su cuadro clínico crónico.
En la puerta del edificio esperaba la ambulancia de una empresa particular para trasladarlo a un centro de salud.
“Este vecino tenía que ser trasladado porque no se sentía bien. Es una vergüenza”, sumó Pablo.
En cuanto a las últimas novedades, el comerciante detalló que este jueves varios operarios de la empresa Edesur se hicieron presentes en la zona.
“Estuvieron por la avenida Independencia mirando y no volvieron más. Dijeron que a las pocas horas se iba a hacer presente una cuadrilla, pero no volvieron más”, lamentó.
En tanto, en la página oficial del Ente Nacional Regulador de la Energía (ENRE) se informó este jueves que poco antes de las 16 hs había 1.111 usuarios sin suministro en el área concesionada a Edesur.
En cuanto a Interrupciones en el Servicio de Baja Tensión, se mencionaba que unos 43 usuarios de Balvanera estaban a oscuras y otros 45 en Monserrat. Junto a San Cristóbal y Constitución –sin usuarios a oscuras registrados en ese momento- son los cuatro barrios que abarca la zona de la Avenida Entre Ríos y su asociación de comerciantes.
De todos modos, vale aclarar que en muchos casos el número de usuarios no se condice con la cantidad de gente afectada. Por otra parte, los registros oficiales parecen no reflejar lo que ocurre en las calles de estos barrios, ya que la cantidad de afectados se extiende por varias cuadras en torno a Entre Ríos.
Todo este malestar de vecinos y comerciantes ocurre mientras el Gobierno nacional decidió intervenir administrativamente la empresa Edesur por al menos 180 días.
Así lo informó el lunes 20 de marzo el ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, con el objetivo de garantizar “la fiscalización del cumplimiento de las obras y de la mejora en el servicio” en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
De este modo, se designó como interventor a Jorge Ferraresi, intendente de Avellaneda y exministro de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación. Seguirá a la vez al frente de la municipalidad bonaerense.
Su intervención será “administrativa” y estará a cargo de “fiscalizar la prestación del servicio y obras de inversión”, no intervendrá en “en el área operativa”. “No es una intervención operativa, la empresa sigue a cargo de las operaciones, es para fiscalizar la prestación del servicio y monitorear las obras de inversión”, remarcaron fuentes oficiales.